Cada año cientos de crías de aves caen de sus nidos y necesitan de alguien que las alimente y las cuide hasta que puedan valerse por sí mismas.
La inmensa mayoría son pequeñas aves como vencejos, aviones, gorriones, verderones y otros paseriformes como jilgueros o verdecillos.
Este programa de voluntariado busca a personas responsables y comprometidas con tiempo suficiente para poder dar de comer y atender a los polluelos hasta que estén listos para sobrevivir en el medio natural.