[12 de julio de 2013]
El Gobierno regional renueva su colaboración con SEO/Birdlife tras el exitoso proyecto que permitió el año pasado seguir la migración de la cigüeña 'Yerga'
Después de los buenos resultados del proyecto de colaboración que iniciaron el pasado año el Gobierno de La Rioja y la Sociedad Española de Ornitología (SEO-Birdlife), que permitió seguir en directo y con todo detalle el viaje migratorio de un ejemplar de cigüeña blanca, bautizado como ‘Yerga’, y obtener abundante y valiosa información sobre el comportamiento migratorio de la especie, la Consejería de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente ha decidido colaborar de nuevo con esta organización para seguir avanzando en el estudio de algunas de nuestras aves más emblemáticas o amenazadas.
En esta ocasión se ha elegido un ejemplar de aguilucho cenizo (Circus pygargus), un ave rapaz que está incluida en el Catálogo Español de Especies Amenazadas en la categoría de vulnerable y con la que la administración medioambiental riojana está desarrollando desde 1996 una campaña de protección de nidos y salvamento de polluelos. El pasado lunes 8 de julio agentes forestales de la Comunidad Autónoma y técnicos de la SEO colocaron un dispositivo GPS en una hembra reproductora de aguilucho cenizo, a la que se ha bautizado como ‘Treviana’, nombre de la localidad donde se ha capturado el ejemplar, para obtener información de sus hábitos migratorios que nos ayudará a trabajar en su conservación.
El proyecto permitirá un seguimiento continuo del ejemplar durante los próximos años. El dispositivo de seguimiento, un emisor satélite GPS solar, recoge varias localizaciones diarias del ave que, cada cinco días, se mandan al satélite que ofrece su ubicación exacta. Los movimientos de ‘Treviana’ se podrán consultar en la web de migración de las aves que la SEO tiene para el proyecto de seguimiento de aves migratorias que desarrolla a nivel nacional www.migraciondeaves.org.
Al establecer la localización del ave varias veces al día durante varios años, podremos conocer con todo detalle sus hábitos migratorios, cuándo abandona tierras riojanas, cuánto tiempo permanece exactamente en sus áreas de cría e invernada, si lleva a cabo premigraciones antes de emprender su viaje largo hacia tierras subsaharianas, cuáles son sus zonas de alimentación… aspectos, todos ellos, que permitirán optimizar las iniciativas que desde la Consejería de Agricultura, Ganadería y Medio ambiente, a través de la Dirección General de Medio Natural, se llevan a cabo para su conservación.
Cerca de 850 pollos salvados
El aguilucho cenizo es una rapaz nidificante en casi toda la Península, si bien su distribución está determinada por la disponibilidad de hábitat ya que cría fundamentalmente en cultivos de cereal, aunque también en manchas de vegetación natural. En los últimos años la especie ha sufrido un declive de sus poblaciones debido a la pérdida de pollos durante la cosecha.
La principal amenaza de las poblaciones de aguilucho cenizo radica precisamente en la destrucción de nidos y polladas por la acción de cosechadoras, así como en la intensificación de la agricultura. El hecho de que la especie instale sus nidos en el suelo dentro de cultivos, y el adelanto en la recogida de las cosechas, provoca que estas faenas se realicen cuando aún los pollos no han volado, produciéndose mortandades de hasta un 90 %.
La administración medioambiental riojana, consciente de este problema, puso en marcha en 1996 una línea de subvenciones para la realización de determinadas prácticas agrícolas que posibilitaran la reproducción con éxito de la especie en nuestra región. Durante la campaña de reproducción, agentes forestales y técnicos de campo desarrollan una intensa búsqueda de nidos en distintas zonas de La Rioja, para compensar económicamente a los agricultores que retrasen la cosecha de cereal en esas fincas hasta que vuelen los pollos. Así, en todos estos años las ayudas han permitido salvar más de 850 pollos de aguilucho cenizo.
El pasado año, la Dirección General de Medio Natural controló 45 parejas reproductoras de aguilucho cenizo, de las cuales algo más de la mitad, el 51% sacaron algún pollo adelante. Un porcentaje muy elevado de ese éxito reproductor alcanzado la pasada campaña fue posible precisamente por el manejo de los nidos y el retraso de la cosecha; si no se realizaran estas campañas de salvamento sacarían sus pollos adelante 1 de cada 10 parejas y gracias a las ayudas la supervivencia de las nidadas se multiplica por cuatro. Finalmente, el pasado año se salvaron 45 pollos y se subvencionaron 20 nidos.
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