Fauna esteparia
El medio estepario en La Rioja
En La Rioja , al igual que en el resto de España, no hay estepas verdaderas pero si áreas esteparizadas. No en vano, el trozo de Valle comprendido entre Alfaro y Alcanadre guarda cierta similitud con las próximas Bardenas Reales navarras o con los Monegros aragoneses, los dos mejores enclaves esteparios del Valle del Ebro.En esa franja se suceden pequeñas planicies de escaso drenaje, con colinas y planas que apenas superan los 600 metros de altitud. Son terrenos que soportan una acusada sequía, y que alternan zonas salinas con barranqueras -"Yasas"- de régimen hídrico estacional. Como consecuencia de los siglos de laboreo y pastoreo el primitivo encinar y coscojar han desaparecido, y la vegetación de los baldíos es rala, con predominio de los arbustos adaptados a la aridez (tomillo, espliego, ontina, albardín, salobre, etc.). Son tierras aptas para el cultivo y -al margen de los tradicionales regadíos nacidos del río Ebro- menudean el cereal de secano y los barbechos. Por extensión, también consideramos área esteparizada la zona cerealista de la cuenca del Tirón.
Invertebrados
Los animales invertebrados constituyen la base sobre la que se asientan numerosos eslabones de la cadena alimenticia. En las zonas esteparias forman una comunidad muy bien adaptada, gracias a su especial habilidad para soportar condiciones extremas. Aquí están bien representados grillos, saltamontes, mariposas y arácnidos, entre los que sobresale el escorpión.
Aves nidificantes
Las aves, a diferencia del resto de los vertebrados no alados, poseen una comunidad exclusiva para este tipo de espacios áridos y abiertos. Ello es debido a que su capacidad de vuelo les permitió salvar los obstáculos geográficos para colonizar los nuevos medios apropiados. Son aves que en general presentan un colorido pardo que las camufla en un paisaje sin apenas refugios.En primer lugar sorprende el gran número de aláudidos. Esta vocinglera familia puede llegar a suponer hasta el 70 % del contingente de aves de la estepa. En La Rioja nidifican con asiduidad la calandria común, las cogujadas común y montesina y la terrera común. Además también lo hacen la alondra común y la totovía aunque estas utilizan además otros medios y no son tan exclusivas de las zonas esteparias. En segundo lugar, y como lógica consecuencia de la abundancia de insectos, es de destacar la presencia de otros pájaros insectívoros como la collalba rubia, la collalba gris, el bisbita campestre y la curruca tomillera.Pero, sin duda, el grupo de aves más interesante de las que sólo nidifican en estos áridos y abiertos páramos de La Rioja, es el formado por la ortega, el sisón y el alcaraván, auténticas joyas de la fauna riojana por su rareza. Otra de las ilustres de la estepa es la ganga, asidua acompañante invernal de los bandos riojanos de ortegas, que ha anidado en alguna ocasión en esta Comunidad. Entre las aves rapaces nos encontramos a los aguiluchos que con sus largas y estrechas alas vuelan lentamente a ras de suelo donde atrapa a sus presas. De ellos el aguilucho cenizo es exclusivo del Valle, mientras que el aguilucho pálido aprovecha también las zonas abiertas del piedemonte de la Sierra. Por último y dada la proximidad de otros medios (ribera del Ebro, regadíos, etc.), a estos yermos también se acercan otras aves, como la perdiz roja, el buitrón, el triguero, el cernícalo vulgar o el mochuelo.
Otros vertebrados
Si bien evolutivamente no han tenido tiempo de organizarse en comunidad estable, también hay otros vertebrados que han sabido adaptarse a estos nuevos espacios creados por el hombre. En La Rioja, especies como el sapo de espuelas, el sapo corredor y el sapillo moteado procrean sin problemas en los charcos, pequeñas lagunas endorreicas y balsines de riego. La culebra de escalera, la culebra bastarda y el lagarto ocelado se esconden en el matorral. Pero los animales más desconocidos en estas zonas son la lagartija colirroja, la lagartija cenicienta y el eslizón ibérico, que explotan las zonas más desprovistas de vegetación, y presentan aquí los cuarteles más noroccidentales del Valle del Ebro. Entre los mamíferos no es difícil encontrar a la liebre, el zorro, el ratón moruno, el topillo común y la musarañita, que con casi 3 gramos de peso máximo, es el mamífero más pequeño de la Península, animales todos ellos que también podemos encontrar en otros medios.
Nombre científicos de las especies citadas en el texto (solo fauna actual de La Rioja) Ver [ 17 Kb]