a) Pérdida de hábitat
Desde la segunda mitad del siglo XX se han producido cambios en el hábitat de las montañas riojanas con pérdida de cultivos en altura, aumento de matorral y arbolado (principalmente coníferas), reducción de la cabaña ganadera extensiva e incremento de pistas.
b) Aislamiento de núcleos
En el Sistema Ibérico se reconoce la existencia de dos núcleos: La Demanda (Burgos-La Rioja) y Urbión-Cebollera-Castejón (Soria-La Rioja), ambos con densidades muy bajas, y posiblemente aislados del resto de la población ibérica, lo que compromete su viabilidad.
c) Mortalidad no natural
Aunque el furtivismo no parece una amenaza importante (la caza menor está restringida encima de los 1700 m), la caza de paloma con puestos fijos constituye un riesgo potencial al situarse en su área de distribución aunque está adecuadamente regulada.
d) Cambio climático
El cambio climático actual podría estar agravando la situación de estas poblaciones relictas que ya han retraído su presencia a las cotas más altas.
e) Competencia con la perdiz roja
Aunque se ha sugerido una posible competencia con la perdiz roja, al coincidir ambas especies en las mismas áreas con una densidad similar, no se tienen evidencias claras al respecto.