14 de mayo de 2019

URImagen en alta resolución. Este enlace se abrirá mediante lightbox, puede haber un cambio de contextoUn equipo de ingenieros de la Universidad de La Rioja desarrollará un nuevo sistema de anclaje para las señales verticales de las vías públicas por encargo del Gobierno de La Rioja de forma que la sustitución de las señales se realice de forma más rápida, económica y segura.

El proyecto, que ha sido contratado a través de la Oficina para la Transferencia de los Resultados de la Investigación (OTRI) de la UR, ha sido presentado por el rector de la Universidad de La Rioja, Julio Rubio; el consejero de Fomento, Carlos Cuevas; y el director de la investigación, el catedrático de Ingeniería Eléctrica de la UR Emilio Jiménez Macías.

Se trata de la primera iniciativa que se promueve al amparo del protocolo de colaboración suscrito entre el Gobierno de La Rioja y la Universidad de La Rioja en junio de 2018 para llevar a cabo proyectos de I+D+i en los ámbitos de la conservación de carreteras y seguridad vial, entre otros.

El grupo DEMAS (Design Modeling and Simulation in Science and Engineering) será el responsable de llevar adelante el proyecto denominado oficialmente Sistema innovador de anclaje para señalización vertical en vía pública.

Actualmente, cuando una señal vertical se derriba por el impacto de un vehículo –habitualmente- el coste de restituirla es mayor que el de colocar una nueva señal, puesto que el anclaje existente no permite poner de nuevo una señal sin antes tener que hacer labores costosas -en tiempo y dinero- de retirada de material para poder volver a poner una señal.

El grupo de investigación propone solventar el problema mediante una pieza que permite la restitución de la nueva señal sin las costosas labores de retirada de parte de la zapata de anclaje, mejorando el proceso de sustitución que se realiza actualmente. No obstante, esa pieza también entraña cierta dificultad de fabricación y montaje, y sería preferible un sistema de sustitución que fuera sencillo y económico.

En esa línea, el grupo va a investigar un nuevo sistema que permita restituir la señal a un coste reducido, con escasa complejidad técnica, y que además sea más seguro para los ocupantes de los vehículos que pudiesen impactar con la señal.