El uso de pantallas de visualización de datos (PVD) se ha convertido en los últimos años en una actividad cotidiana que puede suponer, fundamentalmente en trabajadores de oficinas, muchas horas de dedicación diaria.Esto facilita la aparición de molestias oculares, atribuidas por los mismos usuarios al uso del ordenador, así, frases como "el ordenador me da dolor de cabeza", "se me irritan los ojos", etc., se escuchan habitualmente.