Las transformaciones en la vida de las personas se reflejan en nuevos hábitos de consumo, por ejemplo, productos más saludables para hacer frente a las nuevas necesidades. Desde la reducción de sal al aumento del consumo de frutas y verduras, pasando por la potenciación de la actividad física y el apoyo a las tendencias ecológicas. Un nuevo escenario en el que identificar la tendencia de consumo es vital para el sector.
A través de dinámicas de grupo y de investigación bibliográfica se observa la influencia de las nuevas dinámicas en las tendencias creadas por los consumidores, los nuevos hábitos alimenticios y la transformación de nuestra dieta.
Los consumidores son conscientes de todos estos cambios y de los problemas que conllevan. Buscan alimentos sanos y muestran cierta preocupación por los productos que comen y por su salud. Se detectan nuevas tendencias de los consumidores que engloban cinco grandes categorías:
En España, los consumidores muestran una tendencia paulatina de retorno a modelos tradicionales de alimentación asociados de forma evidente con la dieta mediterránea. Sin embargo, en la actualidad incorporan en su dieta alimentos atractivos y que "ahorran tiempo", aunque menos saludables, que están asociados más bien con la dieta anglosajona.
Los cambios en las dietas, asociados a los cambios sociales que se han sucedido, supone nuevos retos. De hecho, el consumo abusivo de alimentos basados en un aporte calórico procedente de grasas y no de carbohidratos, ha provocado que las personas sufran enfermedades que no se habían padecido en España con tanta asiduidad como se están dando en la actualidad, lo que está provocando un despertar de los consumidores en lo que alimentación saludable se refiere.
Se percibe, pues, un deseo latente de los consumidores de modificar los hábitos de alimentación, pero el ritmo de vida actual y la falta del hábito en sí, imposibilita llevarlo a cabo de una forma inmediata.