1 de marzo de 2010

-¿Cómo ven las cooperativas, reunidas en el VI Congreso de Cooperativas Agro-alimentarias, la situación actual?

Siempre hay cosas que cambiar e impulsar algunos sectores. Lo cierto es que hay un desánimo en general, porque las cosas no van bien ni en agricultura ni en ningún otro sector.

-¿Es la época de crisis un periodo de oportunidades o es una frase fácil de decir pero difícil de aplicar en el sector alimentario?

La verdad es que es complicado, el sector agroalimentario está siendo el que para un poco en Europa todos los problemas que existen. Lo cierto es que el agricultor es una persona que tiene los pies clavados en el suelo, que es muy real, y que ha pasado malos momentos en muchas ocasiones. Creo que si tiene muchas ganas de salir del mal momento, iremos a mejor.

-Cooperativas Agro-alimentarias está dando cada vez más pasos hacia la comercialización, el productor ve la oportunidad de unirse para tratar de concentrar oferta, aunque el proceso está siendo más lento de lo deseado.

Sí, posiblemente es muy lento. Lo cierto es que si no lo asumimos y no vamos todos en grupo, va a ser muy difícil que la agricultura salga adelante.

Creo que la fórmula de las cooperativas es la idónea, es la única manera de que podamos defender en cada sector nuestros productos.

-Siendo algo crítico ¿qué es lo que se ha hecho mal para que a la hora de comercializar los precios vayan a la baja?

Lo cierto es que hay una concentración de compradores, antes había muchísimas tiendas, hoy la verdad es que compran cuatro grandes superficies y eso hace abaratar mucho el producto, a veces incluso por debajo del coste de producción.

No sé si lo hemos hecho mal nosotros o si el sistema ha venido de esta manera, quizá podríamos haber previsto que esto iba a ocurrir y bueno la competencia es grande, también es cierto que están entrando muchos productos de terceros países que es una competencia difícil de asimilar, pero creo que estamos buscando futuro y el congreso habla del futuro.

Apuesta por que nosotros seamos el futuro. Creo que por ahí es por donde tendremos que tirar para arriba de la agricultura.

-¿Cuáles serían esos pilares sobre los que basar ese futuro?

El gran paso es la comercialización en común, concentrar un poco la oferta para que la demanda tenga una respuesta importante e intentar unirnos desde la agricultura.

Lo cierto es que la gran competencia que hay de productos hace que vayamos a la baja y por eso la unión es lo más importante.

-Desde las cooperativas de Madrid están intentando relanzar un proyecto central de compra-venta, ¿para cuándo se podrán empezar a ver los resultados?

Está ya en marcha, lo que pasa es que eso requiere un proceso de adaptación y de camino. Creo que en un par de años, estaremos ya, por lo menos, a velocidad de crucero.