10 de marzo de 2010

El del calzado ha sido de los pocos sectores industriales que ha logrado mantener los pies en el suelo en plena crisis. Y todo apunta a que este año seguirá pisando fuerte. Según datos de la Federación de Industrias del Calzado Español (FICE), las exportaciones de los primeros once meses de 2009 alcanzaron los 1.600 millones de euros, tan sólo un 1,7% menos que el mismo periodo del año anterior. Una cifra que ya la quisieran para sí multitud de manufacturas y que confían mejorar esta campaña.

El sector es consciente del buen momento que atraviesa. Y ello se refleja en que el Salón Internacional de Calzado y Artículos de Piel (Expocalzado + Iberpiel), la gran cita profesional del sector que reúne entre el 11 y el 13 de marzo en Ifema a las principales firmas del sector, ha recuperado a 75 marcas que no participaron en la edición de 2009. Cerca 700 casas nacionales e internacionales estarán representadas por las 314 empresas expositoras, que presentarán hasta el sábado sus principales novedades para el próximo otoño/invierno.

Según Rafael Calvo, presidente de FICE, el sector del calzado es, dentro de los vinculados a la moda, uno de los que cuenta con más presencia internacional. Asimismo, Francia e Italia siguen siendo los principales compradores de calzado español. Por otra parte, el mercado chino, pese a ser responsable de menos de un 1% de las exportaciones, crece a un ritmo del 17% interanual. "En China se dan las condiciones para seguir creciendo y este debe ser uno de los objetivos del calzado español", opina Calvo.

Con todo, la producción nacional ha aumentado su presencia en las tiendas. La patronal del sector sitúa en el 70% la proporción de calzado de fabricación española que inunda los escaparates, en detrimento de los artículos de otros países. No en vano, las importaciones de calzado decrecieron un 6% en 2009.

Vuelven los tacones

Las colecciones de otoño/invierno vienen marcadas por diseños de altura. Tacones y plataformas, junto a botas de caña alta y botines, volverán a brillar en los escaparates. El color reivindica su espacio en el armario invernal, aunque en tonos fríos y sólidos -azules, marrones, grises y morados-. Los zapatos, por su parte, se adornan de cadenas, flecos, púas y tachuelas. Las puntas cuadradas y redondeadas, abiertas en muchas ocasiones, siguen ganando terreno, aunque algunas colecciones ya comienzan a apostar por puntas más finas. La piel de pelo se instala en las botas y botines.

Con un paseo por los expositores veremos que las marcas de calzado hacen, además, un guiño a los años ochenta con la vuelta de los náuticos y las deportivas en versión reinventada. Las botas de agua tendrán también protagonismo propio.

Por otro lado, las pieles naturales, refuerzos en puntera y tacón, hormas formativas y suelas flexibles y antideslizantes son algunas de las innovaciones tecnológicas, que aplican las marcas a los zapatos infantiles, segmento éste que gana peso en Expocalzado con su propia zona.