La Bodega Institucional de La Grajera está dotada de un sistema integral de aprovechamiento geotérmico para la climatización de las instalaciones y en diferentes aspectos del proceso de elaboración del vino, como es el control de temperaturas durante las fermentaciones alcohólica y maloláctica y también en la crianza del vino.

El ahorro energético, el bajo coste de mantenimiento, la seguridad o el menor impacto ambiental, además de la reducción de emisiones de CO2 y la no dependiencia de combustibles fósiles son algunas de las ventajas que aporta este sistema energético. Es, por tanto, un modelo de eficiencia e innovación que posibilitará a las bodegas de la DOC Rioja verificar los beneficios del empleo de este tipo de energía.

Para el aprovechamiento de la energía proveniente del subsuelo se han realizado 55 perforaciones a más de 100 metros de profundidad. El trasvase de calor de la tierra a la bodega se realiza a través de intercambiadores geotérmicos y mediante bombas de calor se distribuye el agua por todas las salas, extrayendo en invierno el calor del suelo y transfiriéndolo al edificio y, en verano, trasladando el calor del edificio al suelo.

vista exterior de la Bodega Institucional de La Grajera

La bodega y el edificio administrativo. R. Lafuente

sala de depósitos

Depósitos.