La cría ecológica de animales se asienta en el principio de fuerte vínculo entre los animales y el medio físico. Esta necesidad de vínculo con la tierra obliga a que los animales tengan acceso a zonas al aire libre y a que la alimentación sea ecológica, preferentemente producida en la propia explotación. Además se rige por disposiciones estrictas relativas al bienestar animal y al cuidado veterinario.
Producción animal
1. La principal exigencia para desarrollar la ganadería ecológica es cumplir el principio de complementariedad entre el suelo y los animales, por lo que se excluye la producción en establos cerrados (ganadería intensiva). El hecho de que la producción esté ligada al suelo implica también que los animales dispongan de espacio al aire libre y que la densidad de animal por hectárea esté limitada.
2. Todos los animales criados en la misma granja deben criarse cumpliendo las normas de producción ecológica.
3. Debe seleccionarse las razas que mejor se adapten al entorno y las más resistentes a las enfermedades.
4. En cuanto a la alimentación , debe hacerse con productos ecológicos, preferentemente producidos en la propia explotación.
5. Los cuidados veterinarios deben priorizar la prevención y si se precisan tratamientos, debe darse preferencia a los tratamientos naturales sobre los tratamientos con antibióticos.
6. Está prohibido el uso de sustancias destinadas a estimular el crecimiento, como las hormonas, y a controlar la reproducción.
7. Bienestar animal . Algunas prácticas como el corte de rabos, recorte de dientes y pico o el descuerne se emplearán únicamente por motivos de seguridad, higiene y salud. Está prohibido mantener los animales atados y se establecen normas muy precisas sobre las características que deben tener las instalaciones de cría. El transporte debe realizarse respetando el bienestar animal, de tal forma que el estrés sea mínimo.
8. Apicultura
9. Acuicultura