Cuidado abuelos, mantened vuestras alpargatas fuera del alcance de los nietos. Esta temporada se han puesto de moda y corréis el riesgo de tener que salir a la calle descalzos. Si es que donde estén tantos años de sabiduría…
El padre de Julio ya las fabricaba hace muchos años en La Rioja y ahora es él quien, manteniendo los mismos sistemas de producción artesanal y con la misma calidad, ha creado Chato y Chata reinventando este tipo de calzado.
Los Chatos son de piqué o rejilla, las Chatas igual pero con cordones y Picnic es su colección de alpargatas de las de toda la vida, esas que todos recordamos por lo cómodas que eran, en ocho atractivos colores que se repite en una banda cosida a su suela de caucho natural. ¿A qué estáis esperando chatos/as?