13 de octubre de 2010

Pero también calzado. Un sector que no ha tirado la toalla ante las dificultades arancelarias e idiomáticas o la complejidad de la estructura y sistema comerciales de aquel país. Su perseverancia, con viajes individuales de empresas, misiones comerciales colectivas o participaciones en ferias desde hace años, comienza a dar sus primeros frutos en un mercado que sólo demanda marcas y donde están ya entronizadas las principales firmas zapateras del mundo. Los más de cuatro millones de euros que representaron las exportaciones de calzado a China hasta junio suponen casi el triple de la cifra lograda durante todo el año 2005 (1,5 millones), según datos de las Cámaras de Comercio