1 de junio de 2009

Las autoridades chinas prometieron el el 31 de mayo, usar la nueva Ley de Seguridad Alimentaria como plataforma para intensificar el control y aplicación de la ley, esperando terminar con los problemas sobre alimentos que han afectado la reputación de la industria y la confianza del consumidor.

La ley, aprobada por la legislatura china hace tres meses, entrará en vigor el 1 de junio y reemplazará la actual Ley de Higiene Alimentaria. Su objetivo es promover la eficiencia de la red de vigilancia de la seguridad alimentaria por medio de estándares más rígidos, supervisión estricta y un sistema de retiro de productos por debajo de los estándares, así como castigos severos a quienes violen la ley.

Los Departamentos estatales de salud, agricultura, supervisión de calidad y administración del comercio, que tiene diferentes responsabilidades, han hecho planes para la implementación de la ley.

Se formarán dos paneles nacionales de expertos para vigilar los estándares de seguridad y control de riesgos de seguridad. También se establecerá un centro nacional de control de riesgos para aumentar el nivel de la evaluación de seguridad, detección de ingredientes tóxicos y precaución de riesgos, dijo el ministro de Salud, Chen Zhu. El Ministerio de Agricultura, responsable de vigilar la seguridad de productos agrícolas, ha estado elaborando regulaciones respecto al uso apropiado de piensos, aditivos y pesticidas, así como cuarentena de animales, dijo el viceministro Chen Xiaohua.

La Administración estatal de Industria y Comercio prometió fortalecer la supervisión del mercado de circulación de alimentos, especialmente los minoristas de alimentos a quienes se les pide que garanticen la seguridad de la comida que venden.

China cuenta con una ley de higiene alimenticia que entró en vigor en 1995 para regular temas sobre seguridad alimenticia. Sin embargo, es anticuada y el sistema de monitoreo de alimentos ha sido culpado desde hace mucho tiempo por falta de eficiencia, lo cual ha ocasionado repetidos escándalos que van desde productos lácteos contaminados hasta vegetales con exceso de pesticidas.