Enmarcado dentro de la línea de olivicultura, el Servicio de Investigación Agraria de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Mundo Rural y Medio Ambiente cuenta con un panel de análisis sensorial de aceite de oliva, cuyos fines son participar en proyectos de investigación y experimentación, colaborar con otras entidades en la divulgación y promoción del aceite, así como dar un servicio al sector oleícola riojano.
El panel está integrado por un equipo de profesionales de diversa procedencia, incluyendo especialistas del Gobierno de La Rioja, técnicos de la Denominación de Origen Protegida Aceite de La Rioja, olivicultores y personal de empresas elaboradoras y envasadoras de aceite. Para su funcionamiento, emplea la sala de análisis sensorial con la que está equipada la Almazara Experimental de La Grajera. Dado que es un panel experimental y no un panel oficial, no cuenta con acreditación ENAC. Sin embargo, tanto las instalaciones como el desarrollo de su actividad se rigen por las normas del Comité Oleícola Internacional y las normas de la UE, y los catadores se mantienen entrenados mediante sesiones de cata periódicas, participación en ensayos intercomparativos, asistencia a cursos de formación, etc.
Autocontrol de la calidad del producto
Los aceites elaborados a partir de olivas por procesos mecánicos se clasifican en tres categorías en función de sus características cualitativas. En la Unión Europea, dichas categorías se denominan, de mayor a menor calidad, como "aceite de oliva virgen extra", "aceite de oliva virgen" y "aceite lampante". Esta clasificación tiene mucha importancia para los operadores, porque de ella depende el precio de venta del producto, además del destino del mismo. Sólo las dos primeras categorías pueden comercializarse de forma directa, mientras que el aceite lampante debe ser sometido a un refinado. Para obtener más información acerca de la clasificación pueden consultarse la página web del Comité Oleícola Internacional, o la página web de la DOP Aceite de La Rioja
Para realizar la clasificación de los aceites de oliva, la legislación europea marca unos parámetros físico-químicos y unos parámetros organolépticos. Los primeros se obtienen mediante técnicas analíticas, servicio que ofrecen numerosos laboratorios tanto privados como públicos, como el Laboratorio Regional de La Grajera. Los parámetros organolépticos son analizados por personal entrenado en la técnica del análisis sensorial, empleando los sentidos del gusto y el olfato.
Actualmente, la Ley 28/2015, de 30 de julio, para la defensa de la calidad alimentaria, en su artículo 10 dispone que "los operadores incluidos en el ámbito de aplicación de esta ley deberán establecer un sistema de autocontrol de las operaciones del proceso productivo bajo su responsabilidad, con el fin de cumplir lo establecido en la legislación específica correspondiente y asegurar la calidad alimentaria de los productos". Esto implica que cada operador es responsable de que el producto que ponen en el mercado se adecúe a la categoría que declara en la etiqueta.
Conscientes de la importancia de esta exigencia en el ámbito de la calidad organoléptica de los aceites de oliva, la Consejería de Agricultura, Ganadería, Mundo Rural y Medio Ambiente pone a disposición de los operadores de aceite de oliva riojanos el Panel de cata experimental de La Grajera.
Entrega de muestras
Las empresas elaboradoras o envasadoras de aceite riojanas pueden entregar muestras de aceite en las instalaciones de la Finca La Grajera, para que el panel evalúe la calidad de las mismas y emita un informe que pueda emplearse para justificar el autocontrol. Este informe sólo dará fe de la muestra recibida y expresará la opinión del panel en el momento de realizar la cata.
Para solicitar información sobre cómo entregar las muestras, es necesario contactar previamente con la Sección de Medios Agrarios en el teléfono 619 400 937 o en el correo electrónico medios.agrarios@larioja.org.