30 de diciembre de 2010

Logroño, 30 de diciembre de 2010. El Presidente del Gobierno de La Rioja, Pedro Sanz, ha aprovechado su encuentro anual con los medios de información regional para denunciar, con firmeza, el nuevo incumplimiento del Ministerio de Fomento y del equipo de Gobierno del Ayuntamiento al ser incapaz de garantizar la liberalización de la AP-68 a su paso por Logroño a partir del próximo 1 de enero. Pedro Sanz, recordando su experiencia política, ha denunciado que esta gravísima situación "nos devuelve al viejo y rancio estilo socialista de prometer para no cumplir". Igualmente, ha calificado este incumplimiento del Gobierno central así como del PSOE y PR de "mentira, engaño y traición" a todos los riojanos y logroñeses.

Pedro Sanz ha comparado la situación actual con la de anteriores Gobiernos socialistas que "prometieron a corto (plazo), con objetivo electoral y que sólo nos dejaron maquetas". El Hospital de Calahorra, el campo de fútbol o el Palacio de Congresos y el de Deportes forman parte de una lista de agravios a las que ahora hay que sumar la no liberalización de la autopista. Además, ha adelantado un nuevo proyecto socialista-regionalista que puede entrar en el cajón de las fotos y maquetas: el tranvía logroñés. A este respecto, Sanz ha asegurado que se conforma con el "Transporte Metropolitano (puesto en marcha el pasado 22 de diciembre por el Gobierno de La Rioja) porque creo que en el tranvía no me subiré".

El máximo responsable del Ejecutivo regional ha calificado de "dramático" el rol desempeñado por el equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Logroño que, el pasado 28 de diciembre, se desplazó a Madrid para negociar la liberalización de la AP-68, entre las estaciones de Arrúbal y Navarrete, prometida el pasado 26 de marzo: "No sé si son unos inocentes o unos caraduras", ha ironizado, sobre la gratuidad de esta infraestructura de competencia estatal.