El CTIC (Centro Tecnológico de la Industria Cárnica), y el CNTA (Centro Nacional de Tecnología y Seguridad Alimentaria), han llevado a cabo de manera conjunta un proyecto con el objetivo de reducir los aditivos y sustituir los alérgenos en productos cárnicos usados como ingredientes en platos congelados.
El estudio desarrollado durante los tres últimos años, ha logrado demostrar que pueden reducirse e incluso eliminarse algunos aditivos y alérgenos en pechugas de pavo para platos congelados. Si bien, los aditivos, aplicados con un criterio que los justifiquen, permiten alimentos con una vida útil más larga. El trabajo de investigación ha contado con apoyo económico de ADER; el programa PROFIT y el Fondo Europeo de Desarrollo Regional.