La climatización de un edificio demanda mucha energía. La utilización de elementos como el muro cortina potencia el ahorro. En estos momentos desde diversos departamentos se estudia que además estos elementos favorezcan la corriente de aire para que en invierno se convierta en una fuente de calor que reduzca el consumo en sistemas de calefacción.
Las fachadas de los edificios se convierten de esta forma en colectores de energía solar que al calentar el aire forman una corriente y a su vez en verano aíslan al edificio del calor exterior.
Para la construcción de estas pieles además del uso de carpintería metálica con elementos de aluminio se construiría utilizando cemento, piedra o chapa.
El interés en estas alternativas que fomenten el ahorro energético y se disminuyan el impacto ambiental queda patente en la implicación mediante financiación de diversos proyectos desde el Ministerio de Ciencia e Innovación, que previsiblemente se extenderán hasta 2012.
Autor: J.M. Porquet para Eurosca