Magnanni ofrecerá a cada uno de los consumidores personalizar sus pares de zapatos y cambiar colores y detalles. Para ello, la firma instala durante dos o tres días el taller en un centro comercial y pone a disposición del cliente hasta cinco modelos en color crema sobre los que los usuarios podrán definir el color o estampado que más les guste. La marca española entregará los pares al gusto del consumidoren unas dos horas aunque la firma asegura que en algunas ocasiones, dado el grado de perfección que requieren los clientes, han enviado algún par de zapatos a su fábrica española para darle el toque final y se le devuelve al cliente en el plazo de una semana.
Dada la exclusividad de los clientes, cada par va acompañado de algún detalle a cargo de la casa de calzado, ya sea un cinturón a juego o una botella de aceite, en función del país en el que en ese momento esté el taller viajero.
Hasta ahora, los centros comerciales de Bergdorf Goodman, Neiman Marcus o Nordstrom, en Estados Unidos, los japoneses Mitsukoshi y Takashimaya, el británico Harvey Nichols o el castizo El Corte Inglés de Serrano han contado con la presencia del taller viajero de Magnanni. La firma tiene su sede en Almansa (Albacete) y cuenta con 650 puntos de venta en todo el mundo. La firma es conocida en todo el mundo ya que el 90% de su producción se vende fuera de España.