La cepa Moscatel de Alejandría surge como un producto muy atractivo para ampliar la oferta de uva destinada a consumo fresco en el mercado nacional por sus características de sabor, aroma y aspecto. Esta opción también podría representar, para los productores del secano costero, una alternativa más rentable que la elaboración de vino, destino que tradicionalmente se le da en nuestro país a esta uva.