Después de tanto tiempo de vacaciones las rutinas del invierno las tenemos un poco olvidadas, pero pronto, nuetros hijos e hijas, van a tener que volver a tener que levantarse temprano, hacer deberes, deporte... y cumplir con un horario poco flexible, a diferencia de lo que viven en verano. Por eso, es importante, que por lo menos, una semana antes de que comience el curso escolar, empecemos introduciendo ciertos cambios en casa, como por ejemplo acostarnos pronto, levantarnos temprano, preparar juntos el material escolar, ajustar el horario de las comidas, ir reduciendo las horas de videojuegos...... para que no se les haga tan dura la vuelta. Así las transición de las vacaciones al cole no se les resultará tan dura.