Tres historias de amor, tres mujeres enamoradas, tres chicasfrancesas…
Un" ménage a trois ", agitado pero no mezclado. El cinefrancés de los 60 nos presenta mujeres liberales, liberadas,apasionadas, vitales, que toman protagonismo por encimade los hombres y los arquetipos sociales de la época.En Los paraguas de Cherburgo (Les parapluies de Cherburg),los avatares de una historia de amor cantada como una óperade Mascagni nos introducen en la personalidad de una actrizque va a marcar un estilo en la interpretación y en la formade ser y estar en la pantalla. Una Catherine Deneuve fría,tierna, delicada, intransigente nos descubre un tipo de nuevaheroína, más existencial, más profunda que sus coetáneashollywoodienses.
A la deriva (La dérive) es una pequeña joya, una rareza quenos presenta a una Justine moderna, a una chica de provinciasque no se para, que no se rinde frente al desengaño amoroso,que huye hacia delante y que representa la fuerza de lajuventud, de la experimentación del sexo como "educaciónsentimental"… Linda Vandal, Jacqueline Vandal son losseudónimos cinematográficos de una joven actriz que dejóel cine para convertirse en una de las poetas y escritorasmás importantes de Francia. La película se proyectará porprimera vez en España y tendremos el privilegio de contarcon su presencia.
Y para terminar Brigitte Bardot, Moravia, Friz Lang, Eldesprecio (Le Mépris)… un coktail explosivo. Una obramaestra compleja, quizás la más personal de Godard y lamás espléndida de Bardot.
Tres mujeres fascinantes, enamoradas, locas, fatales, parano olvidar, para alimentar el inconsciente colectivo de losque alguna vez podamos amar.
Pedro Luis Soldevilla