1.- ¿Cual es el origen de su empresa? ¿Dónde ha encontrado más dificultades y dónde ha encontrado ayuda?
La empresa se formó cuando nos reunimos un conjunto de estudiantes de ingeniera de España, Francia, Inglaterra, Líbano y Chile. Nos dimos cuenta de que compartíamos los mismos objetivos de tener impacto social y de desarrollar tecnologías punteras.
La mayor dificultad siempre estuvo en que la gente que no había seguido de cerca nuestros éxitos académicos y profesionales pudiera ver nuestros ambiciosos objetivos como un síntoma de ingenuidad e idealismo.
Hemos encontrado ayuda en universidades (Open City Technology proviene de la Universidad Politécnica de Madrid y ha sido creada con el apoyo del Vivero de Empresas del Parque Científico de la Universidad Carlos III de Madrid), en estudiantes dispuestos a dedicar esfuerzo y tiempo, en madri+d que ha confiado en nosotros y en nuestra familia y entorno cercano.
2.- ¿Qué tecnología han desarrollado y aplicado?
Hemos desarrollado tecnologías de inteligencia artificial que permiten que plataformas de formación (e-learning) puedan adaptarse automáticamente a los diferentes tipos de estudiantes, modificando no sólo los contenidos, sino también las metodologías pedagógicas.
Por otro lado, hemos desarrollado herramientas colaborativas y portales de gobierno electrónico, todos ellos enfocados a la transferencia de tecnologías y conocimientos que puedan tener un impacto social en regiones en vías de desarrollo.
3.- ¿Cuando es necesario un producto o servicio de estas características? ¿Para que tipo de usuarios?
Las plataformas de formación son útiles para grandes empresas que deseen soluciones formativas con mayor eficiencia. Les interesa que cada minuto dedicado por sus trabajadores a formación sea lo más eficiente posible, para que se alcancen los objetivos con menos tiempo y coste y para gestionar el talento interno de forma integrada con la formación.
En el ámbito social, estas mismas herramientas de formación son muy útiles en colegios de países en vías de desarrollo. Es muy difícil conseguir profesores de calidad para estas regiones, de forma que tener una plataforma de formación potente y barata, que se adapte a las necesidades de cada individuo, ofrece muchas ventajas.
El resto de plataformas de gobierno electrónico y colaborativas se encuentran enfocadas a gobiernos locales y municipios, que deseen invertir en modelos de negocio sostenibles que solucionen sus problemas sociales en lugar de gastar dinero para solucionar esos mismos problemas sociales. Detrás de todos estos proyectos tenemos la idea de los emprendedores sociales, personas e iniciativas que desean, además de sostenibilidad económica, alcanzar un impacto social.
4.- ¿Puede integrarse con otras tecnologías y/o en otros sistemas o productos?
La Fundación Open City tiene como objetivo dar acceso, a municipios de todos los tamaños y lugares, a los beneficios que ofrecen las nuevas tecnologías de gobierno electrónico, tanto a nivel de reducción de costes, aumento de la transparencia o aumento de eficiencia. Se trata de la histórica iniciativa OpenCityPortal, promovida por altos cargos del Banco Mundial, Naciones Unidas y el Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo, y que es compatible con múltiples plataformas open source de gestión de contenidos.
Esto quiere decir que las miles de aplicaciones desarrolladas por muchas comunidades de programadores Open Source (código abierto) por todo el mundo se pueden integrar sin dificultad a las soluciones que ofrecemos a los gobiernos locales.
Además también se ha alcanzado compatibilidad con LMS (plataformas de gestión de la formación). Como centro tecnológico internacional de la iniciativa, nosotros nos hemos encargado de esta compatibilidad e integración.
A nivel interno, hemos hecho compatibles todas nuestras herramientas, desde las plataformas de formación, hasta las de gestión de la información y transferencia de tecnologías.
5.- ¿Cree que el entorno para la creación de empresas desde las universidades e instituciones científicas ha mejorado en los últimos años?
Sin lugar a dudas.
6.- ¿Qué consejo daría a alguien que quiera emprender desde la ciencia y la tecnología?
Existen muchos apoyos que están a disposición de los emprendedores, desde los departamentos de investigación de las distintas universidades, hasta iniciativas regionales y nacionales. Les aconsejaría que invirtiesen un tiempo en conocerlos: suele merecer la pena.