Agentes de la Guardia Civil han inmovilizado una partida de cerca de 30.000 pares de calzado fabricados en China y transportados hasta la provincia de Alicante. La mercancía fue precintada al existir fundadas sospechas de que los zapatos pueden contener una sustancia tóxica, utilizada para prevenir la formación de hongos que deterioren el calzado, que provoca graves reacciones cutáneas a quienes los calzan.
La intervención de la Guardia Civil se produjo en El Campello y en Elda. En el primer municipio fueron decomisados unos 10.000 pares, mientras que en una empresa de transporte de la segunda ciudad se precintaron otros 20.000. Los agentes están a la espera de los resultados de los análisis pertinentes para obtener la confirmación absoluta de la peligrosidad de este producto, según fuentes cercanas al caso.
Al parecer, el destinatario de toda la carga era un industrial de Elda. La investigación sigue su curso, bajo la supervisión de un juzgado. Por este motivo, la Guardia Civil rechazó ayer ofrecer cualquier detalle sobre esta operación policial.
La sustancia en cuestión, que tanta alarma genera entre las autoridades de Consumo, se denomina dimetilfumarato.