A la hora de comprar unos zapatos, el cliente no se conforma con cualquier cosa. Por una parte, es importante que el cuero utilizado no destiña los calcetines ni las medias, pero al mismo tiempo no se quiere renunciar al máximo confort, al que se asocian características tales como la transpirabilidad.
Hasta ahora, sin embargo, la tecnología de coloración convencional no había sido capaz de satisfacer dicha demanda. BASF ha desarrollado por ello una tecnología que, por un lado, consigue sólidas tonalidades que no destiñen y, por otro, responde a exigencias de confort tales como la transpirabilidad. ¿Quién no se ha visto alguna vez en esta situación? Estrenas zapatos y al final del día los calcetines o incluso los pies terminan del color del forro. El hecho de que los zapatos forrados destiñan o no depende en la mayoría de la calidad del cuero, ya que las pieles que se utilizan normalmente para forrar el calzado se dividen en dos categorías: cueros para forrería con acabado o sin acabado.
Enseguida queremos mostrar nuevos caminos sin acabado obteniendo así forros de cuero con máxima transpirabilidad. Las pieles para forrería sin acabado están limitadas en la mayoría de los casos a tonalidades claras o beige, ya que el riesgo de que estos tonos destiñan es mucho menor. Si el cuero del forro, además de no haber recibido acabado, ha sido teñido en colores intensos como el rojo, el negro o el azul, el riesgo de que se produzca un fuerte sangrado de los colorantes será mayor, haciendo que los calcetines se tiñan rápidamente del color del cuero.
En Conclusión: si las pieles del forro han recibido un fuerte y sólido acabado, destiñen menos. El único problema que se presenta en estos casos es que las capas de acabado obstruyen los poros de la superficie, bloqueando la absorción de la humedad e impidiendo la permeabilidad del vapor de agua. El acabado se convierte por tanto en una barrera, lo que provoca la conocida sensación de estar "nadando" en el zapato cuando los pies producen mucho sudor.
El reto de producir una piel para forrería moderna e innovadora consiste por tanto en evitar, que ésta destiña o pierda el color y conservar al mismo tiempo la transpirabilidad del cuero, ya que sólo de esta manera se podrá garantizar al consumidor un máximo confort del calzado, sin que por ello tenga que conformarse con limitaciones en lo que respecta a diseño y color.
La solución a este dilema ha llegado con Lugafast Colorlock, un sistema patentado para pieles de forro que permite obtener múltiples variaciones cromáticas, excelentes solideces en húmedo, al sudor o al roce y al mismo tiempo una elevada permeabilidad al vapor de agua. La novedad del sistema se basa principalmente en la utilización de colorantes reactivos que se fijan a las fibras del cuero dando así el nombre a ésta tecnología (Colorlock = bloqueo o inmovilización del color). Las anilinas convencionales, sin embargo, se unen a las fibras mediante enlaces iónicos, poco resistentes y reversibles, que provocan un fuerte sangrado de los colorantes o hacen que éstos destiñan tan pronto como se forma humedad en el entorno.
Imagen 1: Enlace químico de un colorante convencional
Imagen 2: Enlace químico de Lugafast Colorlock
Colorido y transpirabilidad han dejado, por tanto, de ser características incompatibles y es que, gracias a la firme unión del sistema Lugafast Colorlock al cuero, ya se pueden elaborar pieles de forrería en una amplia gama de opciones cromáticas sin prescindir de extraordinarias solideces en húmedo y al roce.
En la imagen 3 se observa la comparación entre las solideces al sudor de pieles bovinas convencionales y pieles que han sido tratadas con el sistema Lugafast Colorlock. Las diferencias que se aprecian son más que evidentes. Con ayuda del sistema Lugafast Colorlock se puede evitar prácticamente por completo el desteñido o sangrado de los colorantes. Ensayos realizados en situación de uso normal confirman estos resultados (imagen 4).
Es obvio que el excelente comportamiento del sistema Colorlock ante la humedad y el roce evita que se tiñan los calcetines del color respectivo del cuero. Por otra parte, lo que funciona en tonos negros o rojos es igualmente efectivo en otras tonalidades.
La imagen 5 presenta los colores básicos disponibles del sistema, entre los que se encuentran el negro, el pardo claro y oscuro, el rojo, el azul y el amarillo. Todos los tonos se destacan por los estupendos resultados obtenidos en los ensayos de uso y además se pueden combinar entre sí, lo que permite al diseñador de calzado disponer de toda la paleta cromática para sus creaciones.
En la imagen 6 se muestra una comparación entre la permeabilidad al vapor de agua de un cuero para forros con acabado convencional y un cuero para forrería Colorlock sin acabado.
Los resultados del ensayo demuestran claramente la superioridad del sistema Colorlock, ya que, gracias a la mayor permeabilidad se consigue también un menor índice de humedad y sudor en el interior del calzado. Este sistema es el único con el que el calzado en tonalidades oscuras puede combinar excelentes solideces del cuero con gran confort de uso.
Ahora los diseñadores disponen de múltiples posibilidades a la hora de crear todo tipo de calzado utilizando el cuero como medio para marcar tendencias. En colaboración con la escuela de moda Ars Arpel de Milán, en Italia, BASF Leather Chemicals ha diseñado una colección propia de bolsos y zapatos Lugafast. La tecnología Lugafast Colorlock no sólo es versátil en cuanto a tonalidades, sino que también es apta para distintos tipos de cuero, ya sean de origen bovino, porcino o caprino. Asimismo, se puede aplicar en cuero curtido con cromo o libre de cromo (FOC), así como en pieles teñidas con productos de origen vegetal o en pieles ecológicas, lo cual permite garantizar la diversidad cromática perfecta para cada artículo.
Por primera vez se puede presentar al consumidor un calzado demandado en el mercado desde hace tiempo pero que hasta ahora no se había logrado producir: uno que combina el confort y la diversidad cromática con buenas condiciones de uso y mínimas pérdidas del color."