16 de julio de 2009

“Las empresas no van a descuidar sus políticas de innovación a pesar de la crisis porque de ello depende su futuro”, asegura Alison Brimelow (Reino Unido, 1949), presidenta de la Oficina Europea de Patentes (OEP) desde julio de 2007. Antes, dirigió la Oficina Británica de Marcas y, entre 1999 y 2003, la de patentes, además de liderar la Delegación británica en el Consejo Administrativo de la OEP.

Brimelow constata que, “a diferencia de las marcas, la inversión en patentes se mantiene”. Pero no se quiere pronunciar sobre si la OEP va a bajar las tasas como ha hecho la OAMI (Oficina de Armonización del Mercado Interior), que se ocupa de las marcas.

¿Cómo valora las posturas de la UE y EEUU sobre la Propiedad Industrial (PI)? ¿Se va a producir un acercamiento global?
Cada oficina tiene su propia visión sobre las patentes, pero la uniformidad a escala mundial crece más rápido que en otros sectores, por lo que es necesario duplicar los esfuerzos. Hace 30 años, la joven OEP se relacionaba con Japón y EEUU en ámbitos muy técnicos, algo que hoy es una práctica establecida.

En el derecho sustantivo, hay distintos puntos de vista sobre el dilema “el primero que inventa o el primero que presenta la solicitud”. EEUU da prioridad (bonifica) a quien inventa primero, mientras que Japón (y la UE) conceden la patente a quien presente la solicitud de registro primero. EEUU tiene una filosofía más liberal.

Lo más efectivo es la cooperación para no solapar esfuerzos de forma innecesaria. Las cinco oficinas más grandes –EEUU, Japón, Corea, China y la OEP– comparten diez proyectos Foundation. Cada oficina está al frente de dos proyectos. La madurez de los sistemas ofrece perspectivas de un crecimiento conjunto.

¿Cuál está siendo la influencia de la crisis en el número de registros de patentes y el coste que supone a las empresas? ¿Están descuidando las compañías la PI?
No creo que se pueda decir que las empresas descuidan su gestión de patentes. Lo que sí que es cierto es que controlan con mucho rigor en qué gastan su dinero. Invierten menos en marcas, pero mantienen la inversión en patentes. No sabemos cómo evolucionará la coyuntura económica, en 2008 las empresas hicieron lo que pudieron para cuadrar sus cuentas. Es difícil cuantificar la caída de las solicitudes de patentes, los datos que facilitan algunas oficinas son incoherentes. En mi opinión, las empresas desean proteger su innovación ya que así aseguran su futuro crecimiento. Ésa es una gestión inteligente. No creo que las compañías vayan a confiar únicamente en sus secretos de marca.
¿Ha bajado el número de registros en la OEP, como en las oficinas nacionales?
No puedo dar una respuesta categórica. Según los datos de abril, la cantidad de solicitudes disminuye, pero no se trata de una caída en picado. En España se produjo una fuerte disminución de solicitudes en enero y febrero, pero los últimos datos muestran un repunte.

¿Cuántas solicitudes rechaza la OEP?
En 2008, La OEP sólo concedió el 49% de las patentes presentadas. Las que se rechazan suponen un gasto para las empresas, por tanto, es necesario actuar con rapidez.

¿Cómo es la relación de la OEP con las agencias nacionales, como la española?
Cooperamos con la OAMI pero somos instituciones muy diferentes. Nuestra colaboración con las autoridades nacionales. como la OEPM, es fundamental.
Entre nuestros proyectos, destaca uno excelente, un sistema de traducción automática, disponible en España, rápido, fácil de uso y gratuito.

¿Qué papel juega el español en PI, teniendo en cuenta a Latinoamérica? ¿Ha perdido la partida ante el inglés –y francés y alemán–?
Es importante la cuestión del idioma. La OEPM es una autoridad que participa en el Tratado de Cooperación en materia de Patentes. Dicho Tratado es una puerta para solicitantes hispanohablantes y de Hispanoamérica.

¿Lastran las negociaciones sobre el idioma el desarrollo de la PI?
La OEP no participa en las negociaciones de la patente comunitaria, asunto sensible.

¿Es la patente comunitaria una utopía?
La patente comunitaria no existe todavía, puesto que no se ha llegado a un consenso sobre una patente unitaria en Europa. Estamos a medio camino y la UE aporta una visión unitaria. Es absolutamente deseable que se consiga. Venimos intentándolo desde los últimos 30 años. Será muy atractiva para las pymes ya que sería más simple y barato. Una patente global necesitará una lucha de más de 30 años...

¿Se están debilitando los derechos de PI?
No creo que los derechos se estén debilitando. La historia de las patentes muestra que se repiten con regularidad los periodos de duras críticas al sistema… recordemos el caso de Suiza y de los Países Bajos, que favorecieron las imitaciones, pero luego adoptaron las patentes. El debate es sano, pero tendría que celebrarse a escala europea, a escala del mercado común.

Sistema de traducción automática
A diferencia de la OAMI, con sede en Alicante, la OEP no tiene relación alguna con las instituciones de la Unión Europea. La OEP es el brazo ejecutivo de la Organización Europea de Patentes y recibe la supervisión del Consejo Administrativo. Tiene su sede principal en Munich desde 1978, año de su creación. Cuenta con oficinas en Berlín, Viena y Bruselas .Analiza las peticiones de registro de patentes en la UE, tanto por Estados miembros como por países que pertenecen a al Tratado de Cooperación de Patentes, que ofrecen protección en 38 países europeos.

La petición se publica 18 meses después de hacerla. A los Estados miembros se les ofrece la opción de acelerar el procedimiento. Todo el proceso cuesta 1.230 euros –1.150 online–. La vigencia máxima son 20 años. En 2008, la OEP rechazó el 49% de las solicitudes presentadas. Entre sus proyectos, Brimelow destaca “un sistema de traducción automática, disponible en España, rápido, fácil y gratuito”.