Villarroya (200x261)Coordinadores: María Teresa Alberdi, Beatriz Azanza y Emilio Cervantes

Año publicación: 2016 - 317 p.

Colección: Ciencias de la Tierra, nº 34

ISBN 978-84-9960-093-2

P.V.P.: 18 €

Se presenta en el libro una visión general del Yacimiento paleontológico de Villarroya, situado en la Rioja Baja a 10 Km al sur de Arnedo. El Yacimiento de Villarroya entró en la historia de la mano del ingeniero de caminos Eduardo Carvajal, director de las minas de lignito de Préjano, Turruncún y Villarroya, que lo presentó en una comunicación al XIV Congreso Internacional de Geología realizado en Madrid. Desde entonces lo han visitado numerosos investigadores de todo el mundo. Se encuentran en él restos fósiles procedentes de más de una veintena de especies de vertebrados que incluyen carnívoros como hienas, lobos, perros, zorros, osos, mustélidos y varios felinos; siete especies de artiodáctilos (cérvidos y bóvidos) y perisodáctilos (équidos y rinoceróntidos) y abundantes micromamíferos. Se conservan fósiles de Villarroya en Madrid en el Museo Nacional de Ciencias Naturales y en el Museo Geominero; en Barcelona, en el Museo del Seminario Conciliar y en el Institut Catalá de Paleontología Miquel Crusafont en Sabadell, así como en el propio Museo de Ciencias Naturales de Arnedo y en algunos museos en Alemania y en Francia como el Musée Guimet y el Musée des Confluences, ambos en Lyon.

Entre los fósiles más destacados obtenidos a lo largo de los años en las excavaciones organizadas en Villarroya se encuentran magníficos ejemplares de mandíbulas de los últimos hipariones de Eurasia que fueron reemplazados seguidamente por caballos del actual género Equus, lo que sitúa a la fauna de Villarroya en una época de transición en donde aún persisten linajes de los grandes mamíferos característicos del Neógeno, junto a otros que aparecieron entonces y han llegado hasta nuestros días.

Los estudios sobre este yacimiento incluyen las técnicas más recientes de datación estratigráfica como las basadas en magnetoestratigrafía, que se han aplicado en una amplitud de estratos de sedimentos lacustres verdaderamente excepcional. Los capítulos del libro presentan una aproximación multidisciplinaria al yacimiento con un constante diálogo entre las diversas aportaciones paleontológicas y las procedentes de la estratigrafía.


Los coordinadores

MARÍA TERESA ALBERDI es Doctora en Ciencias Biológicas y Profesora de Investigación ad honorem en el Museo Nacional de Ciencias Naturales, CSIC. Especialista en mamíferos fósiles del Neógeno y Cuaternario, en especial de las familias Equidae y Gomphotheriidae. Sus investigaciones principales se dedican al estudio de las estrategias evolutivas, distribución biogeográfica y cambios de biodiversidad en la faunas de grandes mamíferos en el Mediterráneo occidental y sus correlaciones con el Hemisferio Sur durante el Mioceno, Plioceno y Pleistoceno continental.

BEATRIZ AZANZA es Doctora en Ciencias Geológicas y Profesora Titular de Universidad en el Departamento de Ciencias de la Tierra de la Universidad de Zaragoza. Especialista en Paleontología de Vertebrados, sus principales líneas de investigación se centran en la paleobiología, evolución y taxonomía de los artiodáctilos rumiantes del Neógeno y Cuaternario, con especial énfasis en el origen y diversificación de las familias Cervidae y Bovidae. Su trabajo gira también en torno a la Bicronología, Tafonomía y Paleoecología de las faunas de grandes mamíferos de las cuencas neógenas de la península ibérica.

EMILIO CERVANTES es doctor en Biología y Científico Titular en el Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología del Consejo Superior de Investigaciones Científicas en Salamanca. Especialista en el análisis morfológico y germinación de semillas, así como en el análisis de aspectos históricos, filosóficos y metodológicos de la Biología, es presidente de la Asociación para el Desarrollo y el Estudio de la Biología en la Rioja (ADEBIR) desde la que se pretende la puesta en valor de bienes patrimoniales y culturales del entorno riojano. A tal fin, ADEBIR ha colaborado con el Instituto de Estudios Riojanos en la organización de reuniones científicas y en publicaciones desde 1998.