Siempre debemos atender el llanto de un bebé, de la misma manera que le atendemos cuando tiene hambre o está sucio, debemos atenderle cuando demanda nuestro cariño, y especialmete por la noche que es cuando más solos se sienten los bebés. Darle amor a un niño o niña no hace que se mal acostumbre, en todo caso se acostumbrará a que le queramos y a recibir todo nuestro amor. Mal acostumbrarse es acostumbrarse a que no te hagan caso y que no te consuelen cundo lo necesites. Si no atiendes su llanto se siente solos, indefensos, ansiosos.... y después es más dificil calmarlos. Por eso simpre es mejor acudir lo antes posible ante su llamada. De todos modos, lo mejor es guiarte de lo que sientas como madre o padre en ese momento, y si tu instinto te dice que cojas a tu bebé no lo dudes y hazlo.